Las mascotas están continuamente en contacto directo con el suelo y, por tanto, con la suciedad. Por otro lado, pierden constantemente pelo muerto.
Tanto el polvo como el pelo acaban en su sistema digestivo al lavarse ellos mismos. Un buen baño eliminará toda la suciedad y el pelo suelto. El cepillado del pelaje y el rapado de animales de pelo largo como el gato de angora o el gato persa ayudan a evitar los problemas digestivos, como los vómitos u obstrucciones intestinales, derivados de las bolas de pelo.
Además, muchas personas no saben cómo cortar las uñas de sus gatos adecuadamente o no se atreven porque podrían cortar de más, de menos, o en un ángulo que dificulte la comodidad del animal. Por lo que nuestra peluquera especializada lo hará a la perfección y dejará las garritas listas para poder jugar sin riesgos.
También debemos considerar que baño se convertirá, además, en una pequeña revisión, en una observación directa de que no existan heridas ocultas por el pelo, parásitos, eccemas, caspa u otros. Es otra forma de comprobar que la salud de nuestras mascotas está perfecta.